Gabilail estaba nerviosa. No se acostumbraba a estas esperas. Ser la pareja de un bandido no era fácil, especialmente cuando lo único que haces es esperar cada vez que ellos se iban. Cada minuto estaba sembrado con el miedo de que su pareja pudiera ser arrestado por la guardia. O peor, que no vuelva. Además, … Sigue leyendo La promesa